Entrevista a Aarón Bosch
Criminólogo, coordinador de centro de menores
Damos la bienvenida a Aarón, muchísimas gracias por aceptar participar en esta serie de entrevistas. Como siempre, empezamos con algo de información del entrevistado.
¿Quién es Aarón Bosch?
Buenas tardes. En primer lugar, quería felicitaros por la labor que realizáis para dar visibilidad a la Criminología. Mi nombre como decís es Aarón Bosch, tengo 27 años y soy de Alcácer, un pueblo de Valencia. Soy Graduado en Criminología por la Universitat de Valencia, especialidad en Criminología Aplicada. Tengo un Máster en Intervención Criminológica y Victimológica del Centro Crímina (UMH), con especialidad en menores antisociales.
Actualmente trabajo como coordinador en un centro de menores de la Comunidad Valenciana. Llevo tres años realizando esta labor. Empecé como educador y, tras homologarme, puedo decir que también soy Educador Social en esta comunidad.
Anteriormente coordiné durante dos años un programa terapéutico, PROSEVAL, dirigido a personas condenadas a prisión o a trabajos en beneficio de la comunidad de más de 60 jornadas. Lo realicé a través de la asociación PREVEN3 de la que soy miembro. En la actualidad estoy trabajando en el campo de la captación en grupos coercitivos a través de las nuevas tecnologías y espero en un futuro no muy lejano poder realizar el Doctorado en este ámbito tan apasionante y complejo.
Realmente impresionante. Vamos a centrarnos en tu labor en el centro de menores, ya que es un sector al que cuesta mucho ver a criminólogos y criminólogas. ¿Cuáles son tus funciones? ¿Aplicas los conocimientos adquiridos en el grado en Criminología?
Como coordinador de un centro de menores, realizamos tareas de reeducación. Mi función principal es la de coordinar el turno: que exista un adecuado impulso de la dinámica educativa del centro hasta aplicaciones de las prescripciones educativas, médicas y técnicas que realiza el equipo técnico del centro.
Rotundamente sí, diariamente aplico mis conocimientos en criminología. En cualquier intervención o taller ya sea individual o grupal con los menores.
¿Como accediste a tu puesto de trabajo actual? ¿Buscaste otras opciones de trabajo como criminólogo? ¿Cuáles fueron?
La verdad es que el factor suerte ha sido muy decisivo, siempre lo comento. Estuve en el lugar adecuado en el momento oportuno. Realicé las prácticas del Máster en el propio centro en el cual trabajo. Estuve durante dos meses realizan estas prácticas y tras un tiempo me llamaron para cubrir una baja laboral de dos meses. Tres años después, aquí sigo, con un contrato indefinido y a tiempo completo.
Si, busque otros trabajos. Se me pasó por la cabeza abrir mi propio despacho criminológico, realicé entrevistas en otros centros de menores y me plantee opositar a la Administración de Justicia y a Instituciones Penitenciarias.
Como siempre decimos, volvemos a ver la importancia de elegir bien las prácticas, una vez más. Volviendo a tu labor, ¿crees que nuestro perfil es idóneo para el trabajo en Justicia Juvenil? ¿Qué aportamos a diferencia de otros estudios? ¿Salimos preparados?
Tenemos mucho que aportar en este ámbito, desde luego. Pero voy más allá, ya no solo en la intervención directa con los menores infractores, sino en el desarrollo de las prescripciones técnicas, médicas y educativas que elabora el equipo técnico del centro formado por otros profesionales como psicólogos, trabajadores sociales o juristas. Creo que se puede extrapolar al ámbito penitenciario de adultos, ya que actualmente la figura del criminólogo no está presente a esos niveles y, por ejemplo, en las juntas de tratamiento podemos tener una visión técnica muy valorable, que puede ser de vital importancia, y no la tenemos.
Personalmente, que se deben mejorar los planes de estudios en el grado de Criminología para estar preparados. Creo que ha habido un »boom» universitario con nuestro grado, pero este auge de estudiantes no se ha correspondido con una mejora y desarrollo de las asignaturas donde muchas están alejadas de nuestra realidad laboral cuando ya eres egresado.
El criminólogo en el ámbito de la reeducación, en general, no es algo muy habitual, ya que suelen hacer esta función otros profesionales. En menores como hemos comentado en varias ocasiones es aún más raro. ¿Está cambiando algo? ¿Qué podemos hacer para conseguir avances en este ámbito?
Actualmente en el centro donde trabajo somos tres los criminólogos que estamos en activo. Me gustaría pensar que sí, ojalá así fuera, pero creo que no está cambiando demasiado. Los tres contamos con estudios superiores relacionados con la intervención de menores antisociales y eso es lo que marca la diferencia. Es necesario tener una continua formación, aunque no solo en este ámbito, claro. Con ser criminólogo o criminóloga no basta, necesitamos mucho más para poder tener cabida en el mercado laboral.
 |
| Asociación para la reeducación y reinserción social |
Para encontrar trabajo, ¿qué marca la diferencia para ti?
Muchos factores. Como decía, una formación continua es vital para nosotros. Otro factor importante es el ímpetu de querer subsistir siendo criminólogo, no tirar la toalla en ningún momento.
No obstante, también creo que la diferencia no la podemos marcar nosotros, tiene que cambiar el contexto laboral de la Criminología. Nosotros estamos preparados para el desarrollo de nuestras funciones y muy formados, pero no encontramos cabida ya que el mercado no está preparado.
Imaginamos que te refieres, entre otros actores, al trabajo de asociaciones, colegios profesionales… ¿formas parte de alguno? Si es así, ¿cuál es tu experiencia?
Vayamos por partes. Por un lado, creo que las asociaciones son vitales para hacer ver nuestro trabajo y nuestra valía como parte activa de la sociedad. Creo que hacéis una labor muy importante y necesaria. Actualmente, yo formo parte de una, no solo por el »feedback» criminológico continuo que recibo, sino por la aportación que hacemos a la criminología nosotros mismos desde la asociación.
En referencia a los colegios profesionales, creo que son parte fundamental también de la solución. Por desgracia, mi experiencia me ha demostrado que también pueden ser parte del problema. Yo soy colegiado del Ilustre Colegio Oficial de Criminólogos de la Comunidad Valenciana. Por ahora, no he visto ningún aporte del colegio para poder solucionar nuestra situación. Para entenderlo mejor, actualmente (28/04/20) la última notícia del ICOC-CV es la felicitación de Navidad. Con eso lo digo todo, ya que llevamos cuatro meses de este año y ante la situación actual de pandemia no hemos visto ningún comunicado, ninguna información oficial, ningún taller o formación tipo »webinar».
De hecho, ha nacido una plataforma de afectados y afectadas en la Comuniad Valenciana ante esta situación de desamparo.
Situación complicada, sin duda. Esperemos que se arregle en el futuro próximo. Para finalizar Aarón, ¿qué consejos puedes dar a un futuro criminólogo o criminóloga que nos esté leyendo?
Me gustaría animar a todo el mundo a seguir formándose, es muy importante. También interésate en el trabajo de otros compañeros y compañeras, crea redes de contactos, forma parte de las asociaciones, da a conocer a estos grupos y el trabajo que realizan…
En definitiva, no tires la toalla ante la falta de oportunidades, entre todos podemos hacer que cambie todo esto realizando presión y convenciendo. No obstante, insisto, para ello necesitamos también un verdadero impuslo de los colegios para empezar a fraguar los cambios en todo el país, cuando eso sea así, necesitarán de todos para poder llevarlo a cabo. Muchas gracias por contar conmigo para esta entrevista, ha sido un placer. Mucha salud y suerte a todos y a todas.
¡Muchas gracias por tu entrevista Aarón!
